Ay, el crochet!

No he podido evitarlo... he estado perdiendo el tiempo.
Este fin de semana no he salido mucho de casa, lo justo para ir a ver mi coche nuevo y comprar unas cervezas para el "café" de mañana. Así que me bien-acompañé de una amiga (gracias Jessi) y dedicamos la tarde a descifrar el código, las risas no fueron escasas y el diccionario profesional de Oxford nos tuvo que ayudar pero... ¡ay, cuando te quedas sola con tu lana y tus ganas de crear! Con las instrucciones más o menos aprendidas me dispuse, aguja en mano, a crear a mi pequeño Babar... Que disgusto! Entre que no tenia mucha maña y que no he tenido mucho ojo al elegir el color (aquí me puedo perdonar porque no hay tantas lanas en una casa) me he horrorizado un poco al ver cual ha sido el resultado!

Me ha quedado tan gordinflis que más bien parece un cerdito! ja ja ja Me siento hasta satisfecha de mi creación babarina. Pero me pueden más estas cosas y lo he hecho una segunda vez:

oooooh!

Este sí que mola!

Me siento realizada... a ver cuanto me dura, que esta noche es Navidad y la paso un poquito más lejos de mi gente de lo que me gustaría... Besitos a todos y Bon Nadal!